La posible contaminación de alimentos o bebidas con objetos externos es un asunto de elevado interés para cualquier instalación en procesos de alimentación ya que puede derivar en costosas pérdidas de producción. Pero, además, puede dañar la marca y reputación de tu empresa e incluso poner en peligro la vida de tus clientes. Desde el momento en el que un determinado proceso ha sido contaminado por un objeto externo, la calidad de los alimentos se pone en peligro.

Conforme a la legislación vigente sobre productos alimentarios (reglamento 852/2004), en cuya fase de producción y empaquetado se considera como objetivo primario, lograr un nivel elevado de protección de la vida y la salud de las personas, en Dimasa disponemos de un amplio surtido de productos detectables.

La gama metal detectable responde a las estrictas exigencias de seguridad de las empresas alimentarias para la detección de cuerpos extraños en el producto. La gama detectable es sensible a instrumentos de control y prevención aplicados en las líneas de producción como imanes, detectores de metales y rayos-X.

Los productos detectables son fabricado con una parte metálica, que permitirá su reconocimiento al pasar por el escáner de metales, y en color azul, para no ser confundido con ningún tipo de alimento (cereales, harinas, carnes, lácteos, etc…). Por este motivo el color azul es ampliamente utilizando en la industria alimentaria en una amplia gama de productos, ya que en caso de pérdida, el objeto es reconocible de forma inmediata por su marcada diferencia.

La alta calidad y fiabilidad de los productos minimizan el riesgo de contaminación para los consumidores y contribuye a garantizar la calidad de las instalaciones en los procesos de alimentación y de bebidas.